Tuesday, November 06, 2007

Querer y desear

Personas que no controlan sus instintos, sus pulsiones. ¿Es porque su voluntad es demasiado débil? ¿O es porque sus instintos son demasiado fuertes?

Algunos son conscientes de ello, como ciertos violadores que piden su castración química. Sintiéndose incapaces de controlar su voluntad, desean que un agente externo debilite sus instintos.

Pero ¿se puede fortalecer la voluntad? ¿No hace falta fuerza de voluntad para aumentar la voluntad? Y quien carezca de voluntad, ¿de dónde sacará esa fuerza?

Un alcohólico o un toxicómano necesitan voluntad para salir de su adicción. Pero precisamente la adicción tiende a anular su voluntad. Es como un círculo vicioso. Algo parecido a aquel borracho que aparece en “El Principito”: “bebo para olvidar que bebo”, decía.

Por otro lado, ¿quién ha logrado someter a sus instintos? ¿Acaso los países o Estados no son un trasunto del instinto tribal? ¿Acaso no son las guerras una explosión de las pulsiones agresivas?

Hay, en cada uno de nosotros, una tensión entre pulsiones y voluntad de la que apenas somos conscientes, porque en esa pugna estamos en ambos lados.

Y sin embargo no debemos ser neutrales. La voluntad es tal vez la única fuerza del universo capaz de regirse (aunque sea mínimamente) a sí misma. La única fuerza no ciega del todo.

Si nos rendimos a las pulsiones y dejamos que la voluntad se apague, quizá no vuelva ya a encenderse.

4 comments:

Gemma said...

Yo también me apunto a la Liga de Voluntades Firmes. ;-)

Lo ideal sería poder canalizar las pulsiones de forma "racional", sensata, quise decir: la cuadratura del círculo...

June Fernández said...

Estoy completamente de acuerdo. Me molestan ese tipo de argumentos: es que los hombres son más infieles porque tienen el instinto de propagar la semillita; hay guerras porque es algo inherente al espíritu humano; las mujeres son de derechas por instinto de proteger a sus crías...

Siempre se utiliza el instinto para justificar intereses bastante menos espontáneos y naturales.

June Fernández said...

Ah (perdona), para justificar pero también para combatir los movimientos que trabajan por la transformación social. Nos hacen pensar que hay cosas que no se pueden cambiar, y de eso nada. Gracias por tu comentario en mi blogs.

saiz said...

Gracias por vuestros comentarios y procuraré pensar en lo que decís.