Monday, February 23, 2009

En el siglo 50

En el siglo 50, allá por el año 5000, ¿seguirá habiendo guerras (más sofisticadas, con armas aún más letales)?

¿Seguirá habiendo Estados?

¿Seguirá habiendo fronteras (con alambradas inalámbricas que desintegrarán a quienes las crucen)?

¿Seguirá habiendo nacionalismos?

¿Seguirá habiendo inmigración ilegal?

¿Seguirá muriendo gente en pateras y cayucos (propulsados, tal vez, con motores atómicos)?

¿Seguirá habiendo dictaduras (con un control más férreo gracias a los avances técnicos)?

¿Seguirá el mundo, en el siglo 50, teniendo dos lados: uno del derroche y otro de las privaciones?

¿Actuarán los humanos de modo diferente en el año 5000, o seguirá todo igual –sustancialmente igual- en el siglo 50?

2 comments:

Anonymous said...

Yo creo que en el s. 50 las cosas irán mejor, siempre y cuando no nos hallamos autoextinguido antes. (Ah por cierto, me gustó lo de las alambradas inalámbricas)

saiz said...

Gracias, Aurora. Yo también espero que sea así. Pero no estoy seguro. Fíjate que, entre el imperialismo romano (o sea: cuando empezó a computarse el tiempo con nuestro sistema de datación, año 1 d. de C., fecha convencional del nacimiento de Jesús) y la actualidad han pasado 20 ó 21 siglos (2009 años) y las cosas no han cambiado sustancialmente.

2009 años después sigue habiendo dominación de unos pueblos sobre otros, explotación, guerras, etc.

Es verdad que en esos veinte siglos se ha avanzado en muchos ámbitos, sobre todo durante los últimos cinco siglos (se descubrió un continente, se ha llegado a la Luna, se han descubierto los antibióticos, se ha inventado la informática...), pero sustancialmente nada ha cambiado en la organización del mundo: países ricos y pobres, guerras mundiales más terribles que las que había entonces, uso de energía nuclear con fines bélicos, etc.

Así que, si la humanidad ya ha perdido esos 20 siglos, puede también perder los próximos 20 ó 30. Yo espero y deseo que no. Creo que ahora es más fácil que no sea así, porque la humanidad puede, merced a los medios técnicos existentes, tomar el control de su propio futuro y no dejarlo en manos de los dirigentes brutales y desvergonzados que hasta ahora han regido sus destinos. Ojalá sea así.