Thursday, June 19, 2008

Estética de insectos

Lo leo en un libro de biología: “Las flores huelen porque producen sustancias químicas volátiles, esto es, que se evaporan fácilmente. Estas sustancias se generan en los pétalos y sobre todo en los nectarios, que se encuentran en la base de la flor, entre los pétalos y el pistilo. Los nectarios segregan azúcares y otras sustancias. Su finalidad es atraer a los animales polinizadores (abejas, colibríes, mariposas, polillas, etc), quienes dispersarán el polen de una flor a otra y así permitirán la fecundación.

Ésta es también la función de los colores vistosos de las flores: la atracción de los insectos polinizadores”.

Así que, siempre que nos acerquemos a una flor para contemplarla u olerla, deberíamos recordar que su color y su perfume no se hicieron para nosotros, sino para los insectos.

Lo más llamativo de esto quizá sea la coincidencia entre nuestro gusto olfativo y visual, y el de los invertebrados. Los mismos colores y aromas que atraen a los insectos nos atraen a nosotros. De ahí que las flores nos huelan “bien”. De ahí que en nuestras calles haya floristerías, regalemos rosas, cultivemos geranios en el balcón y fabriquemos agua de colonia con aromas florales.

Porque, en este punto, nuestro sentido de la estética es igual que el de las polillas.

2 comments:

Anonymous said...

Tal vez porque hubo un tiempo en que éramos insectos, tal vez sea por eso que las flores nos resultan bonitas a la vista y nos gusta tanto el olor que desprenden.

saiz said...

Gracias, Aurora. No sé si hubo en tiempo en que fuimos insectos, pero seguro que, en lo más alto del árbol genealógico, hay un abuelito (ascendiente, antepasado) lejano y común.